La gran actriz de una comedia de W.
Somerset Maugham perdió su yo porque hablaba y vivía como los personajes que
representaba en la escena.
Según la ocasión, se expresaba en su vida real adoptando alguno de los
guiones y de esa manera su yo acabó evaporándose.
Uno de los valores estables del
humano, la moral, lo aplicaba si así lo
decía el guion, sino, se reía siguiendo otro guion, aunque se encontrara
frente a un cadáver.
Se quedó sin personalidad que, según Wahl, es uno de los grandes rasgos de la
cultura occidental:
“La idea de personalidad se desarrolló
bajo la influencia en parte de la filosofía
estoica, en parte del derecho romano y en parte de la religión cristiana.”
Fue un comentario de Kiva, la muchacha escaladora. Nos encontramos acampando en medio de Los Horcones, dos someras cumbres de la Sierra de las Navajas (someras pero muy visibles a gran distancia por encontrarse en lo alto de la sierra).
Peñas Cargadas y una manera de superar la "bola" cimera. La maniobra tradicional es sobre los hombros del compañero.
La noche anterior levantamos
las tiendas en el valle de Peñas
Cargadas, al sureste del pueblo mágico Real del Monte, en el Estado de Hidalgo,
México. Mañana seguiremos en dirección a
la ciudad de Tulancingo.
Los HORCONES al Fondo. Foto tomada de Wikipedia |
Nos faltan muchos kilómetros de caminata, incluido el cruce de varias cañadas.
Esta sierra abunda en afloramientos de
obsidiana. Se asegura que era de donde los aztecas se provenían de este vidrio
volcánico para sus armas de guerra, lanzas, flechas. Pero ya desde antiguo la
gran Teotihuacán extrajo de aquí su material para la representación de diversos
dioses. Y le siguieron en esta práctica los toltecas.
En Peñas Cargadas nos llovió fuerte durante
dos horas. Pero ahora el cielo es despejado y Tlahuizcalpantecutli brilla muy fuerte solo en la noche.
Valle de México. Localización de la sierra de las Navajas. |
Yuma:
-En los tiempos del coronavirus la
gente de la sociedad urbana que pudo se fue a vivir a las comunidades rurales
del país.
Se dio cuenta que sus pensamientos y
charlas diferían de cómo eran en la ciudad. Ahora hablaban como ellos,
genuinamente diferentes unos de otros.
En la ciudad casi todos hablaban como
los medios. Su yo había desaparecido
delante de la pantalla del televisor. Asimismo, hablaban como las páginas de los periódicos. Todos sabían cuántos goles había anotado el Real
Madrid, lo que dijo el presidente de Estados Unidos o que la actriz fulana se divorció
por quinta vez…
Benito:
-Todo relativo ya que su repertorio
multitemático, caótico, su visión del
mundo, no duraba más allá de doce horas o veinticuatro, a lo sumo.
Al día siguiente ya el mundo era
otro. De no estar enterados, ¿de qué hablarían con el compañero de oficina, en la tertulias del café, en la “sociedad informada”
o en las borracheras de cantina?
Hopi: (como algunas personas se
llaman Nicaragua, Oklahoma, Berlín, Irlanda, Paris, Grecia, éste se llama como
su etnia norteamericana: hopi. Con él, y con Kiva, escalé alguna vez la Torre Negra de
Nexpayantla y seguidamente la norte del
Abanico, en la ladera norte del Popocatépetl):
-Ahora, en el campo, los citadinos
que se fueron a vivir a la provincia, se daban cuenta que el sol “sale” por el
este, que aún queda aire respirable, que hay montañas y que la lluvia es una
bendición. Con alegría se enteraron que poco a poco recuperaban su monologo
interior y todo muy en contacto con la naturaleza!
Del cuello de Hopi pende un representación
en bronce de un kachina. Los kachina de los hopis son de importancia
fundamental en las ceremonias de la Danza de la Serpiente y tiene como
finalidad evocar la lluvia. Esta ceremonia se efectúa precisamente en este mes,
es decir, el 20 de agosto.
La reserva de la tribu hopi se ubica
principalmente en Arizona, Estados Unidos, y abarca áreas de Nuevo México,
Colorado y Utah. Una reserva, como un campo de concentración, pero más grande
en territorio que algunos países centroamericanos.
Yuma:
-¡Y se percataron también que Tlahuizcalpantecutli, el gran lucero
conocido ahora también como Lucero de la
mañana o Venus, sigue brillando, como en el calendario lunar de los mexicanos
que dura el ciclo de la siembra- cosecha!
Benito:
-Se enteraron que en muchas
comunidades rurales (por no decir que en todo el país agrícola, siguiendo la
tradición étnica milenaria mexicana) sacan en procesión por las calles a la
Virgen o al santo de la devoción local para pedirle al cielo que llueva. El mismo
ritual en 98 por ciento del dios Tláloc
pero ahora con el ropaje católico).
Kiva:
-En la ciudad moderna, laica y
progresista, cuando falta el agua se bloquean las avenidas por un grupo de manifestantes
para exigirle a la autoridad de esa alcaldía que abra las llaves y deje correr
el líquido vital.
Yuma:
-Aquellos le piden agua al cielo y
estos le piden a la cisterna. Aquellos hacen una comunidad suplicante de oración, a través del rito, y estos
mediante voces, gestos punitivos y
pancartas amenazantes contra la autoridad.
Benito:
-¡Cada quien a su nivel de ver las
cosas!
Hopi:
-Creer sólo en lo que se ve es una
respetable teoría filosófica que viene desde la antigüedad de los grandes
pensadores griegos.
Yo:
-Pero estamos en el mundo moderno en
el que mide cinco milímetros lo que se ve, pues tal es el grueso de la
pantalla.
Benito:
-Ver narcisismos en la pantalla del
televisor durante horas, en el encierro obligado por el coronavirus, no es
edificante para el propio yo del espectador. Muchos perdieron piso y acabaron
soñando fantasías y otras también. Convertidos en espectadores mudos, es verdad,
perdieron su propio monologo interior.
Yuma:
-¡De seguro que los psiquiatras engrosaron su
agenda de consultas, ya antes de que
aparezca en el semáforo nacional la luz verde!
Kiva:
-La pantalla del televisor, o del celular, es la metáfora de la vida que
corre en nuestros días. Ya en 1948 cuando la primera edición en ingles de su
obra El camino del filósofo, Jean
Wahl apuntaba:
“Pudiéramos simbolizar este carácter
superficial del mundo moderno llamándolo un mundo de film donde sólo se ven las superficies de las cosas.”
Hopi:
-En El arte de la novela Henry James advierte que la evaporación del yo
no está tan distante como parece, cuando dice: “alguien se puede desintegrar; en
realidad nada es más fácil; de una manera o de otra, esto le sucede a la gente
a nuestro alrededor.”
Benito:
-Sin pasar por alto que algunos
comunicadores de noticias, y comentadores de deportes, tiene su buena dosis de
exhibicionismo, que en ocasiones llega al solipsismo.
Hopi:
-Cuando Julio Cesar sitiaba al
enemigo construía un cerco para que no escapara y se apresuraba a construir un segundo cerco
para evitar ser atacado por el enemigo que podía llegar del exterior. En algún momento
se encontraba luchando, con éxito, en medio de dos fuerzas antagónicas, una
enfrente y la otra a sus espaldas.
Yuma:
- Una educación equilibrada,
dialéctica, universal, del niño, lejos
de la abstracción, debe mirar a protegerlo de los demonios interiores de la
propia familia y de los demonios que ha construido la civilización industrial
de consumo y deshecho. Una buena dosis de la
Paideia griega y otra de la tradición milenaria étnica, mesoamericana, afianzarán
esos dos cercos.
Benito:
-La televisión es sólo una
herramienta que se usa según el nivel del espectador, como usas la licuadora, el martillo o la computadora y no hay porque
demonionizarla. Si no lo usas apropiadamente, como el martillo, tan útil, te
puedes triturar la mano.
Conozco a personas de la sociedad
urbana que ven televisión con interés y placer. ¿Saben qué tienen en común
todos ellos?, que en sus primeros seis
años de vida ya habían leído, en versión editorial para niños, los fundamentos de la cultura
occidental: Homero, algunos Presocráticos, Platón, Epicuro, Lucrecio, más acá
Seneca, Cicerón, Marco Aurelio. Y de Mesoamérica el Popol Vuh y la Leyenda de los
soles teotihuacanos.
Hasta entonces tuvieron acceso a ver
los programas televisivos. Para ese tiempo su yo había fraguado como el cemento
en la losa “colada” cuando ha pasado un tiempo conveniente y está a prueba de
tormentas… Cicerón insistía en “tener el pensamiento
ocupado en ideas mejores y la voluntad sujeta en todo a la razón”
Kiva:
-Para eso se necesita que el
matrimonio, o la unión de pareja, tenga toda la estabilidad posible. Norman
Mailer dijo en una entrevista: “No hay ninguna razón en el mundo para que la
gente no pueda amarse cada día más
durante ochenta años”
Hopi:
-Me parece un buen punto. Si no se
hace así es como “enviar los niños a la guerra sin fusil” cuando estos entren
en contacto con el mundo de allá afuera. En otras palabras, sin las suficientes
vitaminas culturales, el yo acaba como el personaje de Somerset Maugham…
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